Piedras Naturales: un apoyo importante en el equilibrio de tu energía

Las piedras naturales son un apoyo natural en el equilibrio y restructuración de nuestra energía. Las gemas tienen su propia vibración y energía: no es magia es Ciencia.

Al igual que nosotros, están compuestas por átomos, protones, neutrones en movimiento, esto hace que vibren y al estar en vibración su energía resuena. Su vibración, frecuencia y resonancia la podemos medir en Hertz y esa energía en contacto con la nuestra (que trabaja de la misma manera) se encuentran y entran en un estado de resonancia, de trabajo en equipo. La energía se reconoce y se encuentra, atraemos lo que vibra como nosotros.

De esta manera cuando estamos trabajando con un enfoque previo o específico, la gema se une a nuestro enfoque, es como si se formara una flecha dirigida a un punto concreto. Ahí sí podríamos decir que se hace la magia, pero la magia interna en comunión espiritual de nuestro enfoque bajo un estado de conciencia donde nuestra energía está intencionalmente dirigida y la energía de la piedra que se une a nuestro esfuerzo y enfoque.

Así, un Cuarzo Amatista nos potencia en el trabajo de conciencia, fomenta estados mejor equilibrados de meditación, ayuda a establecer una adecuada sinapsis en nuestro cerebro y nos empuja con mayor facilidad a conectar con nuestra energía superior: crecemos.

Usar una Labradorita azul ahora tiene un sentido más allá de la protección, ya que además es ideal en la amplificación de la energía magnificando las emociones por las que estemos pasando. Nos conectamos con el wifi del universo y somos más capaces de “ver” más allá de lo visible. Esto puede ser maravilloso si estamos decretando y manifestando en alta vibración, pues la energía emitida se multiplica a favor de los pensamientos y actos en consecuencia: Conectamos.

Podemos dejar de temer a la Obsidiana sabiendo que, al estar trabajando de forma interna para superar nuestros demonios, la obsidiana será el perfecto espejo que nos ayudará a amplificar los detalles para poder mirarlos de frente y superarlos. Pero además va más allá, nos muestra más allá de esta vida, de este presente o cualquier tiempo: es el espejo humeante de Tezcatlipoca.

Buscaremos el cobijo y el acompañamiento del Cuarzo Rosa cuando nuestro ser requiera del sostén emocional, del abrazo reconfortante como de una madre. Ayudará a nuestro ser a apapachar el alma fomentando el perdón, la calma y el amor incondicional: restructurará nuestro cuarto chakra.

A lo largo de los años cada civilización y cultura ha entendido claramente la potencia y la fuerza en el acompañamiento de las gemas. Ya sea por poder, salud, protección, equilibrio o moneda de cambio. Las gemas han representado incluso jerarquía y status social. Sus minerales, inclusiones y rarezas aunadas al paso del tiempo, su formación y sobrevivencia las han cargado de la energía a través del tiempo.

Un Jade deja de ser una simple piedra verde y se convierte en el Oro verde de Mesoamérica, un ámbar en una cápsula del tiempo que protege contra adversidades, el ópalo en un fuego guardado en el interior de una gota de agua amplificando la energía emanando luz constante. Piedras para brujos, sanadores, comerciantes, meditadores, soñadores, chamanes y visionarios. Para todos han significado y significan un proceso, una herramienta, un estado de conciencia, una y mil posibilidades.

En la parte química, sus minerales tienen un efecto directo en nuestro organismo. Claro, hay quienes no lo consideran así y hay muchos que “sienten” esos beneficios a otro nivel, un nivel donde no hay cuestionamientos, donde solo hay conexión.

Trabajar en conciencia es un estado amplio donde la mente, el sentir y las acciones se unen en una línea. Donde los chakras superiores, el corazón y los chakras inferiores caminan juntos en plenitud y en armonía, se genera un equilibrio interior que se traduce al exterior. Como es adentro es afuera y nuestros actos y vida cotidiana lo demuestran, Todos usamos diferentes herramientas para subir nuestra energía, yo amo trabajar con las gemas porque su vibración se une a la mía en hermandad, complicidad y magia.

Por Metzxochitl González Oriza

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Y vibra en conexión y con Intención